Ciudad de Buenos Aires – 4 de noviembre de 2025 – Una insólita disputa territorial ha estallado en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, poniendo en jaque la identidad de un sub-barrio ubicado en la difusa línea que separa los tradicionales barrios de Belgrano y Palermo. El foco del conflicto reside en la denominación del área, que debe su nombre a una característica física que, paradójicamente, ha desaparecido con el paso del tiempo, generando una confusión aún mayor entre sus habitantes. La zona en cuestión, cuyo nombre por razones legales y de seguridad omitiremos en esta publicación, se encuentra en un punto geográfico conflictivo, reclamado por ambas jurisdicciones barriales. Originalmente, el sub-barrio se distinguía por la presencia de un extenso descampado con una particular formación geológica. Sin embargo, el crecimiento urbano y la construcción de nuevos edificios han borrado prácticamente toda huella de esa característica distintiva. Según historiadores barriales, el nombre del sub-barrio derivaba de esa singularidad física, asociándose más estrechamente con Belgrano por razones históricas y vecinales. No obstante, recientes proyectos inmobiliarios y una estrategia de marketing que busca capitalizar la “onda” palermitana, han incentivado a algunas inmobiliarias y comercios a promover el área como parte del territorio de Palermo. Esta situación ha generado un profundo malestar entre los vecinos históricos del sub-barrio, quienes se sienten despojados de su identidad y temen que la gentrificación asociada a Palermo termine por desplazar a la comunidad original. “Siempre fuimos parte de Belgrano, conocemos a nuestros vecinos de toda la vida, acá hay familias enteras que viven hace generaciones,” declaró Marta Rodríguez, presidenta de la Junta Vecinal del sub-barrio. “No podemos permitir que nos cambien la historia así como así”. Por otro lado, representantes del sector inmobiliario argumentan que la proximidad a las zonas más modernas de Palermo y la creciente oferta gastronómica y cultural de la zona justifican su inclusión dentro del territorio palermitano. “La dinámica urbana ha cambiado, la gente busca vivir cerca de los centros de interés y este sub-barrio se encuentra en una ubicación privilegiada”, afirma Carlos Pérez, gerente de una importante inmobiliaria que opera en la zona. El gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ha tomado cartas en el asunto, prometiendo una mediación entre las partes y la realización de un estudio histórico y sociológico para determinar la pertenencia barrial del sub-barrio. Mientras tanto, la incertidumbre y la tensión crecen entre los vecinos, divididos entre la tradición y la modernidad, entre Belgrano y Palermo. La resolución de este conflicto marcará un precedente importante sobre la identidad barrial en una ciudad en constante transformación.
¡Guerra de Barrios en Buenos Aires! ¿Belgrano o Palermo? Un Sub-Barrio en el Limbo Identitario





